Hay un jugador que le quita especialmente el sueño a Luis Enrique con vistas al clásico del sábado que viene en el Camp Nou. Y no se trata precisamente de Cristiano Ronaldo, por mucho que todo invite a pensar que el
crack
portugués está volviendo por sus fueros. Para el técnico azulgrana, el gran peligro del Real Madrid no está precisamente en la delantera, sino en el centro del campo. Luka Modric es, a estas alturas, su mayor preocupación. Muy especialmente, a causa de la inoperancia que mostró la medular de su equipo ante la Real Sociedad.
Luis Enrique está convencido de que el croata puede resultar del todo determinante.