El gran hacer de Jorge Sampaoli en el Sevilla en su primera gran experiencia europea ha confirmado los magníficos pensamientos que los grandes del viejo Continente tenían puestos en el hombre que hizo campeona de América a la Selección de Chile. El equipo hispalense terminará 2016 clasificado entre los grandes de la Liga (y sin haber perdido incluso opciones de título), metido en octavos de final de la Champions League, y también en esa misma ronda en la Copa del Rey, con vistas a una eliminatoria preciosa ante el Real Madrid.
Por todo ello, desde hace días nos venimos haciendo eco en DB de la corriente que sitúa al argentino como un candidato ideal para relevar a Luis Enrique
en el banquillo del Barça la próxima campaña. La continuidad del asturiano está en entredicho después de un inicio de temporada irregular, y de (dicen fuentes cercanas al club culé) cierto deterioro de sus relaciones con los pesos pesados de la plantilla, especialmente con Messi.
Sampaoli adora al crack argentino, y juntos podrían formar un gran tándem. Este miércoles, analizábamos en DB los posibles fichajes que el técnico podría hacer en caso de aterrizar en el Camp Nou.
Se trata de un tipo de ADN Barça total, con gusto por el toque, la posesión y el juego de ataque. Su fuerte está en la medular. Pero seguramente pediría ciertas cosas que ahora ya se atisban en el capítulo de puntos a mejorar en la actual plantilla blaugrana.
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