Sigue cobrando fuerza que en caso de que el técnico Luis Enrique no siga en el Barcelona la próxima temporada, su sustituto cobraría forma en la figura del argentino del Sevilla, Jorge Sampoli, que nunca se ha cansado de decir que su mayor deseo es dirigir algún día a Leo Messi.
Sin embargo, el entrenador asturiano, de confirmarse su marcha, ha dejado el futuro del banquillo atado y bien atado, tal como apunta ‘Sport’.
El rotativo sostiene que
en el vestuario azulgrana la opinión generalizada es que
Luis Enrique no seguirá e, incluso, se atreven a aventurar que se tomará
un año sabático al final de la presente temporada.