Caer en la Copa del Rey
le ha supuesto al Real Madrid el primer gran disgusto de la era Zidane
en más de un año, y a varios de los futbolistas de la plantilla blanca un punto de inflexión en cuanto a las críticas o las dudas. Uno de ellos es Álvaro Morata, que no fue escogido por el técnico francés de cara al trascendental encuentro de Balaídos pese a que el equipo necesitaba vencer y marcar al menos dos goles para no ser eliminado por el Celta.
Tanto el rendimiento como los minutos disputados por parte de Morata a las órdenes de Zidane han ido cayendo en picado en el último mes y medio, después de que el canterano madridista, rescatado de la Juventus como futbolista totalmente hecho para la élite, completara una fantástica primera parte de la temporada. Pero ahora vuelve a verse en una situación similar a la que vivió en la campaña 2013-2014, en la que acabó sin apenas protagonismo con Carlo Ancelotti.
No son pocos los medios que ya especulan con algo ‘personal’ (en el sentido futbolístico) de Zidane con Morata.