André Gomes fue, con mucho, el jugador del Barça más señalado por la debacle del conjunto azulgrana ante el PSG en el Parque de los Príncipes. El 4-0 encajado ante el equipo que entrena Unai Emery convierte en poco menos que en una quimera la opción de que los azulgrana consigan hacerse con el título, por mucho que la propia UEFA llegara a señalarles como los grandes favoritos. El portugués quedó terriblemente retratado por un dato muy concreto que hace que su fallo en el que podría haber sido el tanto del empate a un gol, tras el tanto inicial de Di María, parezca algo sin importancia.
El hecho de que el portero del PSG, el alemán Kevin Trapp, llegara a hacer más pases (32) que el portugués (31) deja en muy mal lugar a un André Gomes por el que el Barça le pagó
al Valencia 35 millones de euros el pasado verano y que, de acuerdo con una serie de variables, debería salir incluso más caro.