Prohibido el paso. Florentino Pérez no empieza hoy en esto del fútbol. El mandatario del Real Madrid tiene muy claro que las debilidades del enemigo son también las fortalezas de uno mismo.
El Barça realizó una planificación de chiste el pasado verano. Fichaje que no han convencido ni al más despistado en un grupo que pide/exige quilates para el nuevo curso. El primero, Messi.
El argentino no firmará la continuidad hasta tener más que claro que sus peticiones serán oídas: entradas, con sus correspondientes salidas, que mejoren a un equipo sin relevos de garantías para los puestos titulares.