2017 ha supuesto una vida nueva para Felipe Caicedo. El ecuatoriano, cuyos derechos fueron comprados en su totalidad por el Espanyol el pasado verano para que fuese la piedra angular del nuevo y ambicioso proyecto blanquiazul de cara a esta temporada, encontró sin embargo una fuerte ‘oposición’ en el técnico escogido para llevar las riendas del equipo, Quique Sánchez Flores. La poca confianza entre uno y otro, aderezada por algún episodio tenso entre ambos, provocó que el ariete apenas tuviese minutos en la primera mitad del curso.
Pero ahora todo ha cambiado. Caicedo tuvo todas las papeletas para marcharse del Espanyol en el mercado de invierno, pero esa oportunidad no se concretó y desde entonces está jugando, y mucho. Sus diferencias con Quique parecen haber quedado apartadas. Aunque algunos ven en este nuevo rol del jugador un propósito secundario.
Éste consistiría en hacer jugar más minutos al ecuatoriano para ponerle en el mercado por más valor en verano.
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