Partido intenso. Partido de dos selecciones que se conocen de memoria. Partido clave que, en los últimos tiempos, finales de Copa América y Copa América Centenario mediante (ambas ganadas por la Roja), convirtieron a Argentina-Chile en un neoclásico sudamericano.
Este 23 de marzo de 2017, con Rusia 2018 en el horizonte, el objetivo no es gritar campeón, sino clasificarse al próximo Mundial. Ambos equipos necesitaban sumar y el que sumó -de a tres- fue el local que, lejos de lucir, logró imponerse 1-0 y quedarse con el triunfo.
Tanto Bauza como Pizzi sufrieron bajas en la previa: Dybala por lesión y Vidal por acumulación de amarillas -sí podrá estar vs. Venezuela, el martes-. Para suplirlos, el Patón apostó al Kun por detrás de la línea de ofensiva y su amigo y colega incluyó al Tucu Hernández y a Silva.
Apenas seis minutos tardó Chile en congelar el estadio Monumental de Buenos Aires. Un centro de Alexis, (¿la peina Aránguiz?) sobró a la defensa argentina, Más no pudo frenar a Fuenzalida y gol de Chile. ¿Hubo offside? Mrando la jugada una y otra vez, parecería que no.
Diez minutos después, Mascherano envió un pase frontal al corazón del área chileno y Di María se dejó caer ante un mínimo roce de Fuenzalida. ¿Penal? Tampoco pareció, pero el árbitro brasileño Meira Ricci decretó que sí. Messi no falló y 1-0.
Argentina tuvo el segundo sobre el final de la primera etapa, pero Otamendi quiso fusilar a Bravo y la tiró a las nubes.
En el complemento, Argentina dio una pálida imagen aguantando el empate ante un equipo chileno que lo buscó y no tuvo precisión en el toque final. Alexis sacudió el travesaño de Romero con un tiro libre y, al rato, el ingresado Nico Castillo definió increíblemente mal debajo del arco y desperdició una chance única. El ingreso de Valdivia no fue lo suficientemente mágico para la visita, que sufrió la falta de contundencia y deberá ganarle a Venezuela en casa para reposicionarse en zona mundialista.
Por su parte, Bauza deberá ingeniárselas para cubrir las ausencias de Mascherano, Biglia e Higuaín -suspendidos- en la complicada visita a Bolivia.
