El Barça está dispuesto a todo para armar un equipo realmente competitivo con vistas a la temporada que viene. Para conseguirlo, piensa abandonar la política de fichar jóvenes promesas y se centrará en traer jugadores realmente consagrados. El objetivo fundamental del club es darle vida nueva a una línea, el centro del campo, que
se encargó de marcar muy seriamente las diferencias en los últimos años dorados del equipo. Y el elegido tiene nombre y apellidos: Marco Verratti.
Los servicios técnicos barcelonistas consideran que el italiano es el jugador ideal para que el juego azulgrana vuelva a ser tan brillante como antaño.