El técnico Simeone no salió tan tocado como en la final de Champions de Milan del año pasado. El argentino salió derrotado pero muy satisfecho de lo que vio en el Calderón y destacó el gran esfuerzo de sus jugadores y reseñó que los primeros treinta minutos de partido quedarán en la historia del ambiente y de los aficionados. «Fue un partido extraordinario, hubo una nobleza enorme de un montón de futbolistas de nuestro equipo”, aseguró.
El ‘Cholo’ quiere seguir el año que viene para estrenar el Wanda Metropolitano, pero de su discurso se desprende que el equipo tiene que experimentar cambios, al lanzar Simeone este aviso: “Es una pena que no podamos clonar a jugadores como Godín o Gabi, que le están dando la vida al club».
Los dos veteranos jugadores sostienen al equipo y el mensaje es poder encontrar unos recambios de garantías, cuando ya no puedan continuar.