James Rodríguez se muerde la lengua. El crack colombiano enfilaba el túnel de vestuarios en el que era su último encuentro en el Bernabéu como jugador del Real Madrid con cara de pocos amigos.
El ‘10’ del Real no seguirá vistiendo de blanco. La decisión está tomada en todos los niveles. El jugador pide una continuidad que con Zidane no tiene, ni tendrá. Y ‘Zizou’ reclama la marcha del ‘cafetero’ a un Florentino Pérez que lo mantuvo un temporada extra en el Bernabéu: Zinedine pidió su cabeza sí o sí el pasado verano.