Cristiano Ronaldo es feliz. El Real Madrid es el miura más fiero del ruedo y él el torero que vuelve a abrir la puerta grande tarde sí tarde también.
Lo que funciona no se toca. El aviso del portugués llega alto y claro a las alturas y lo traslada en persona al vestuario. Para CR7 el Real no necesita fichajes de pedigrí, sino mantener un bloque que ha sido y es la clave del éxito.
Y parte de ese mérito recae en uno de los jugadores menso queridos por Zidane, pero al que ‘Cris’ tiene en mayor estima: James Rodríguez.
El crack del Real Madrid ha pedido al colombiano que no se vaya del Real.