Al mal tiempo… Limpieza Leo Messi no se va a pasar semanas lamiéndose las heridas. El Real Madrid es justo vencedor de la Liga y la obligación del Barcelona es pensar en cómo revertir una situación de extrema preocupación que va más allá del alirón blanco.
El problema está detectado. La planificación del Barça fue una chirigota y los capos del equipo, con Leo a la cabeza, exigen, no piden, una limpieza a fondo para construir un equipo de altura que pueda plantar cara al Real de Zidane.
Los jefes de la caseta ponen la lista de la compra sobre la mesa de Valverde –el nuevo técnico del Barcelona- y Robert Fernández, director deportivo, Josep Maria Bartomeu, presidente.
El vestuario entiende imprescindible atar a un lateral derecho de garantías tras el ridículo espantoso de Luis Enrique intentando tirar con Sergi Roberto.
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