Carta abierta a Josep Maria Bartomeu. Los amigos de ‘El Penalti’ dan un paso al frente para poner el foco sobre la gestión de la actual junta directiva de Josep Maria Bartomeu.
Con una moción de censura en marcha, el socio inquieto por una planificación deportiva que no convence, los cracks sin llegar, el club metido en los tribunales y nuevos escándalos como el del ‘Seient Lliure’ amenazando con salir a la luz, en el citado espacio se dirige al máximo mandatario del Barça con una serie de sugerencias para el mejor funcionamiento de la entidad/club que no tienen desperdicio. A saber.
Estimado Presidente:
Han terminado las competiciones y tal vez sea el momento del análisis.Desde el programa del Barça EL PENALTI, de Radio Estel y ETV: www.elpenalti.es nos permitimos la licencia de hacerle unas sugerencias, a modo de decálogo, para intentar que en la próxima temporada podamos competir con mayor igualdad de condiciones y evitar sospechas de adulteración:
Exija la implantación del VAR. No permita que la excusa del dinero pueda volver a impedir goles medio metro dentro, o permita goles de los rivales en fuera de juego de metro y medio. El dinero nunca será bastante para evitar que las trampas sean admitidas como moneda de curso legal
Impida la llamada cláusula del miedo, que debería ser ilegal. Que determinados jugadores se alineen contra todos los equipos y descansen ante el Real Madrid, en sí mismo falsea la competición.
Exigir que desaparezcan las cláusulas que premian a un determinado equipo por las victorias en Liga de otro, para evitar que pueda darse, como este año, que el conjunto local en la última jornada cobrara un dinero extra si el visitante vencía. Es lo más parecido a una prima por perder, llevado a una situación cuya legalidad hace dudar a cualquiera.
Sería interesante que todos los clubes participen en los ascensos y descensos de los árbitros, y que la forma de valorarlos fuera su independencia y honradez y en ningún caso sus errores en la misma dirección, demasiado ostentosa.
En Europa exijan un sorteo automático, con bombos, sin manos inocentes, sin la más mínima duda sobre la temperatura de las bolas, evitando que las sospechas de irregularidades sigan manchando la competición. Por aquello de que las casualidades, de existir, suelen tener una mano detrás que las propicia.
El arbitraje europeo ha de recuperar el espíritu de limpieza. Ver el espectáculo bochornoso del Real Madrid con el Bayern de Munich, con dos goles decisivos en fuera de juego, con expulsiones siempre de la parte alemana y amagos de tarjeta, que avergonzarían a cualquiera, cuando se trataba del rival blanco. Intentemos que en Europa no llegue la contaminación arbitral y volvamos a creer en la justicia. Se debe controlar la designación arbitral y saber porque se les premia o se les penaliza.
Exigir que los distintos comités estén formados por personas imparciales, que respeten a todos los clubes sin que en algún caso sean capaces de reunirse de madrugada si es para perdonar a unos, y si se trata de otros, se dejen los móviles apagados. Hay que pedir que los estamentos estén dirigidos por personas que no sean socios o ex socios de ningún equipo.
Separar la política del fútbol. Se puede seguir siendo un club catalanista sin implicarse a fondo en temas que nos acarrean problemas en la percepción que tienen de nuestro club personas que luego han de juzgarnos y que pueden verse condicionados.
Que los comités, en casos flagrantes de agresiones, puedan entrar de oficio, y deban hacerlo, sin que sea necesaria la denuncia de otro club.
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