Florentino Pérez marca perfil. El presidente del Real Madrid no olvida. Tampoco perdona. Neymar utilizó al Real para hinchar una renovación con el Barcelona que terminó siendo sonrojante y destrozando al vestuario como ninguna.
Las cifras de estrella que el Barça puso sobre la mesa del ‘11’, consecuencia de presiones/amenazas que avisaban de un desembarco del brasileño en el Madrid, hicieron saltar a banca en el Camp Nou sumiendo al club en un desastre financiero que está lastrando a la entidad en el mercado.
La renovación de ‘Ney’, pero también la de viejas glorias como Piqué/Busquets, a la que se suma Suárez y Messi, dejan la caja pelada y al Barcelona sin margen de maniobra.
Es por eso que desde la entidad azulgrana se verían mejor que bien los 222 millones de la cláusula de un Neymar que tiene la puerta del Real Madrid cerrada a cal y canto.
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