El PSG ya se ha puesto en contacto con el Barça para mover ficha y llevarse a Neymar del club azulgrana. A pesar de la grandilocuencia que se le ha atribuido en algunos medios, el conjunto parisino no piensa poner sobre la mesa de la entidad barcelonista la totalildad de la cláusula de rescisión del brasileño, sino que piensa usar a uno de sus jugadores como moneda de cambio: Marco Verratti. El italiano, desde luego, vendría acompañado de una cifra nada desdeñable: 120 millones de euros.
El club parisino quiere convencer así al Barça para que deje de cerrarse en banda y se remita una y otra vez a la cláusula de rescisión como la única opción para permitir la marcha de Neymar del club.