Los primeros entrenamientos del Real Madrid 2017-2018 que están teniendo lugar en Los Ángeles mantienen el mismo denominador común de la pasada temporada, y ese aspecto tiene nombre y apellidos: Antonio Pintus. El preparador físico que Zinedine Zidane fichó por petición expresa a Florentino Pérez la pasada temporada fue el gran artífice de que el equipo acabase la campaña como un avión físicamente. Y eso se consiguió gracias a un plan medido, que en los primeros días del verano se basa en ‘machacar’ físicamente a los futbolistas.
La plantilla que se entrena a las órdenes de Pintus puede dar fe de ello en UCLA. Pero además de esta tónica general, algunos jugadores en contreto están teniendo que seguir un plan específico de entrenamientos por deseo expreso del preparador físico y de Zinedine Zidane. Theo Hernández Gareth Bale, Raphael Varane y Luka Modric son ‘los cuatro elegidos’. Vamos, que Zizou y Pintus no les pasan una.
El objetivo es que ninguno de ellos sufra lesiones de gravedad durante la temporada (en la medida que el cuerpo técnico madridista puede controlar ese aspecto), y por eso, cada uno presenta unas condiciones particulares lo suficientemente concretas como para que tengan que trabajar aparte.
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