El encontronazo que ha tenido Neymar con uno de los fichajes del Barça para la temporada 2017-18, el portugués Nelson Semedo, ha sido al final la gota que ha colmado la paciencia de Andrés Iniesta. El capitán azulgrana ha decidido que la situación que se está viviendo en el seno de la entidad barcelonista ya es del todo insostenible. Por eso, ha instado al brasileño ha hacer efectiva desde ya mismo su marcha del club, si, como todo parece indicar, ésa es realmente su intención.
El brasileño se encaró con el joven lateral derecho, que ha llegado al club este verano procedente del Benfica después de que el Barça pagara 30 millones de euros por él, para recriminarle lo que en su opinión era una entrada excesivamente dura.
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