Florentino Pérez ha tomado cartas en el asunto con Gareth Bale. El delantero galés del Real Madrid consiguió que el club no lo vendiera a final de temporada, pero ha vuelto de vacaciones en baja forma y preocupa mucho al cuerpo técnico. De momento, parece que será suplente en la final de la Supercopa de Europa, la que jugará Asensio o Isco de titular.
El presidente del Real Madrid le ha pedido al delantero que se ponga las pilas ya que no está contento con su rendimiento en sus últimos meses y espera que este año se cuide mejor que en los últimos cursos donde las lesiones le han tenido varios meses fuera de juego. De hecho, Florentino Pérez le ha impuesto una prohibición al jugador que puede crear precedente.
El máximo mandatario madridista ha prohibido al jugador que juegue al fútbol en su casa por riesgo a otra lesión, una medida que sorprendió al futbolista galés que no supo como responder.
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