Más madera. La negativa de Marco Verratti a forzar la máquina para salir del PSG, unida a la intransigencia del Liverpool de abrir la puerta a Coutinho, abre un nuevo abanico de opciones para reforzar la medular del Barça.
Dele Alli gusta en el vestuario azulgrana, especialmente a Messi, que ve en el joven crack la respuesta a las necesidades que plantea el Barcelona en el medio campo.
El joven medio el Tottenham, 21 años, gana enteros en los comentarios de un equipo que asiste con preocupación a la falta de nivel en las operaciones que el club azulgrana tiene abiertas, en concreto en el intento del Barcelona por reclutar a Paulinho.