El Barça ya tiene al tercer refuerzo para el primer proyecto de Ernesto Valverde, un Paulinho que desembarca en el Camp Nou previo de pago de 40 millones de euros al Guangzhou Evergrande chino, pero eso no basta. Tras el ridículo del conjunto azulgrana en la ida de la Supercopa de España ante el Real Madrid, con un 1-3 en casa que deja el trofeo casi sentenciado para los blancos, el club necesita apuntarse todo un golpe de efecto, y confía en hacerlo esta misma semana.
La idea de la entidad que preside Josep Maria Bartomeu es que Paulinho no sea el único jugador que pose con la camiseta azulgrana en los próximos días.
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