El París Saint-Germain jugará la final de la Copa francesa después de eliminar este martes al Rennes en semifinales. El conjunto de Unai Emery se impuso por un ajustado 2-3, si bien el marcador hasta la recta final del partido fue muy claro para los parisinos. La expulsión de Mbappé, certificada por el VAR, a media hora de la conclusión acabó haciendo el pase mucho más sufrido.
El francés por su expulsión y Neymar por la pelea constante que mantuvo con los jugadores del Rennes fueron dos de los protagonistas del choque, aunque los goles que dieron el pase a los parisinos fueran de Meunier, Marquinhos y Lo Celso, según recoge ABC.
El brasileño vivió un complicado duelo, marcado muy de cerca y con dureza por sus rivales, que lograron descentrarle. Así, durante varias fases del juego se dedicó a humillarlos siempre que tuvo la ocasión. Primero aprovechando su increíble calidad, como en una jugada en la que hizo un control con la espalda o «espaldinha» y luego tiró un bonito autopase.
Fuente: ABC/Leer más
