Cristiano Ronaldo provocó la anécdota de la jornada durante la jornada previa a la final de la Champions de este sábado. El delantero portugués estaba ensayando disparos a portería en el último entrenamiento del Real Madrid en Kiev, cuando uno de ellos se desvió del objetivo y acabó golpeando en la cara a un cámara que se encontraba filmando el ensayo.