Aunque la mayoría de los clubes de las ligas más destacadas de Europa cuentan con numerosos jugadores provenientes América Latina, África y Asia, en el Viejo Continente existen equipos como el Athletic Club de Bilbao, cuya filosofía consiste en mantener una plantilla completamente local. Las categorías inferiores del Athletic Club son su mayor tesoro, ya que la entidad vasca no ficha a jugadores que no sean del País Vasco o Navarra. Esta política constituye su sello de identidad y su rasgo diferencial con otros equipos de Europa.