Para combatientes como los jugadores de rugby, el fútbol es un deporte de poco contacto, pero hay excepciones.
Aquí tienes en vídeo a 5 de los jugadores más agresivos. Son de los que reparten estopa y de la buena.
Hay de todo, desde porteros a delanteros, pasando por centrocampistas de renombre.
UNA LISTA LARGA
Para siempre quedará en nuestra memoria la patada en el pecho que el holandés De Jong propinó Xabi Alonso en la final del Mundial de 2010 en Sudáfrica.
Su caso no es un asunto aislado sino que junto a él existen otros ejemplos que personifican la imagen del rudo futbolista, que, cada vez que hace acto de presencia dejando su sello de identidad en un rival, se cuestiona si las normas deberían cambiar o si los castigos deberían ser más severos para los infractores.
Nobby Stiles
Se hizo famoso en los setenta por su peculiar forma de realizar su trabajo. Era el antihéroe que todo equipo necesitaba para reforzar la gloria de mitos del balón como Bobby Charlton o George Best. A la sombra de ellos cumplía a raja tabla su cometido, que se reducía a robar el balón y pasarlo a un compañero. Patadas en los tobillos, provocaciones, empujones, escupitajos, pellizcos y codazos estaban a la orden del día mientras él estaba en el césped.
Vinnie Jones
Su apodo, ‘The Hard Man’, define a la perfección lo que era y lo que hacía. Entre las agresiones que se recuerdan destaca la que le hizo a Gascoigne cuando éste jugaba para el Newcastle. Durante el encuentro le propinó toda clase de golpes hasta que decidió agarrarle directamente por los testículos mientras le decía: ”Me llamo Vinnie Jones, soy gitano y gano mucho dinero. Te voy a arrancar la oreja con los dientes y luego la voy a escupir en la hierba. ¡Estás solo, gordo, sólo conmigo!” Entre sus registros está el haber sido el jugador que menos tiempo ha tardado en ver cómo le sacaban una tarjeta amarilla. Tan solo tres segundos fueron necesarios desde que saltó al campo y le entró al delantero.
Roy Keane
No podía faltar en esta lista el futbolista de Cork. Su afición a los ‘recaditos’ a sus rivales le hicieron ganarse a pulso el mote de ‘psycho’. Muy querido en el Manchester United, pero también muy odiado en el resto de Europa. El centrocampista tuvo un plácido retiro en el Celtic, pero los rivales que se enfrentaron a él todavía hoy lo recuerdan.
Nigel De Jong
Será recordado por siempre por la brutal patada que propinó a Xabi Alonso en la final del mundial de fútbol. La agresión fue más propia de Jackie Chan o Bruce Lee, no obstante, Howard Webb no le mostró la tarjeta roja.
Marco Materazzi
El mítico defensa del Inter de Milán y la selección Italiana es uno de los jugadores más cuestionados de la historia por su juego duro. Sus escalofriantes entradas se sucedían junto a pequeñas provocaciones que lograron sacar de quicio al propio Zidane, que optó por callarlo con un cabezazo en el estómago en la final del mundial. Todo un maestro del juego sucio.
Mark Van Bommel
Ex de PSV, Bayern Múnich, FC Barcelona y AC Milan. En todos los lugares que estuvo dejó detalles de calidad y terribles entradas. Y es que cuando Van Bommel sacaba la guadaña, ningún futbolista permanecía en pie sobre el césped. Acabó su carrera futbolística con una expulsión en su último partido, algo que no resultó extraño para los aficionados del PSV.
Ivan Gennaro Gattuso
Al igual que el anteriormente citado Materazzi, Gattuso desarrolló la gran parte de su carrera en Milan, pero en el AC Milan en lugar del Inter. Su principal característica era la elegancia con la que repartía patadas a diestro y siniestro, siempre a espaldas del árbitro y disfrazando este pequeño defecto con la calidad que salía de sus botas. Muy conocidas eran también sus monumentales broncas debido a su fuerte temperamento.
Luis Suárez
Uruguayo y con mucho fútbol en las botas. El futbolista del Barcelona es capaz de lo mejor y de lo peor. Y cuando hablamos de lo peor, no solo nos referimos a patadas y codazos, mordiscos, como el que le dio a Ivanovic en su partido ante el Chelsea, o a Chiellini en el Mundial de 2016. También se ha ganado a pulso la fama de teatrero, pero eso ya va en otro ranking.
Andoni Goikoetxea
No podía faltar un futbolista del Athletic Club en esta lista. Andoni Goikoetxea fue capaz de lesionar primero a Diego Armando Maradona y después a Bernd Schuster. Su perfil encaja a la perfección con el del buen central, aguerrido, fuerte y casi imposible de superar.
David Navarro
Sus entradas con el Valencia CF dieron la vuelta al mundo. En especial su agresión a Burdisso y su codazo a Fernando Llorente, una auténtica salvajada que los aficionados españoles todavía no le han perdonado.
Pepe
El Real Madrid nunca antes tuvo un problema tan grande como con Pepe tras su expulsión ante el Getafe. 10 partidos le costó su arrebato de locura tras el que acabó golpeando en repetidas ocasiones a Casquero, una sanción ridícula que hizo que una animalada de tal calibre quedase impune. Esta conducta violenta la ha mantenido el central luso durante los últimos años pero sin llegar a los límites que cruzó aquella noche ante el conjunto azulón.
Javi Navarro
El compañero y aprendiz en la zaga del Sevilla de Pablo Alfaro. El valenciano se fue fogueando junto a su compañero del que aprendió algunas de sus peores artes, superándolo en algunas de ellas. Juan Arango tuvo que salir en camilla al haber estado inconsciente y haber sufrido espasmos por tener las vías respiratorias obstruidas por la lengua y la hemorragia de su fractura. Jamás olvidará el codazo de Javi Navarro que dio un gran susto a cuantos presenciaban aquel Mallorca-Sevilla.
Gerardo Bedoya
Este colombiano tiene nada más y nada menos que el dudoso récord de haber superado las 40 tarjetas rojas. Es uno de los jugadores más agresivos que ha habido en la historia del fútbol internacional y el más marrullero del fútbol colombiano. Su última roja fue una joya. Pisó la cabeza de un rival en el suelo. Un tipo cuya actitud sobre el césped es intolerable.
