Cristiano Ronaldo, una leyenda del fútbol gracias a su trabajo, personalidad y sobre todo goles, se caracteriza por una fuerte personalidad y ejerció una vez más como líder en situaciones adversas.
Esto se mostró en la docu-serie de Amazon Todo o nada, donde se ve que tras el descanso en el encuentro entre la Juventus contra el Oporto portugués en la Champions League sacó su carácter.
Las imágenes ya han dado la vuelta al mundo por los insultos que propinó el jugador contra sus compañeros de la Vecchia Signora reclamando la falta de juego y de personalidad.
Algunas frases que dijo el delantero portugués mientras ignoraba a su compañero de equipo Juan Guillermo Cuadrado pidiéndole que se calmase fueron “Jugamos una mierda. Siempre. ¡Yo también me incluyo! Pero hay que decir la verdad. Para jugar este partido de Champions hay que tener personalidad”.
#Neurona ?Un video protagonizado por CR7 expresó furia en el vestuario del Juventus cuando el equipo fue eliminado de la Champions League la temporada pasada
“Jugamos una mierda (…) para jugar este partido de Champions hay que tener personalidad”, dijo, Cristiano. pic.twitter.com/YBXhzLikql
— NeuronaSV (@NeuronaSV) November 25, 2021
Su entrenador, Andrea Pirlo, buscó frenar el tenso momento que se vivió en el vestuario italiano, antes de dar las indicaciones para saltar al césped en la segunda parte con un «Basta Cris, basta Juan».
Sin embargo, gracias al portero argentino de los portugueses que tuvo una noche estelar, Agustín Marchesín, el Oporto fue el equipo que se clasificó para la siguiente ronda y mandó al equipo del luso a casa.
A pesar de la victoria de los italianos por 3 a 2, los portugueses por valor doble de los goles como visitante fueron los que salieron victoriosos del duelo porque en la ida quedaron por un total de 2 a 1 a favor del Oporto en el partido que se disputó en Portugal, mismo resultado que hubo en los 90 minutos en Italia, por lo que el encuentro se resolvió en la prórroga.
Los dos goles de Federico Chiesa sumado al de Rabiot a favor de los italianos no bastaron para anular los dos goles de Sergio Oliveira por parte del Oporto, y dejó una despedida enmarcada por la bronca de Cristiano Ronaldo
