El Real Betis Balompié jugó su segundo amistoso de pretemporada frente al PSV holandés, donde cayó derrotado dos a uno en el Philips Stadion. El gol bético fue de Juanmi de cabeza después de sacar el córner. Sin embargo, lo más importante no fue el resultado, sino dos detalles de dos de los cuatros capitanes del conjunto sevillano.
Joaquín Sánchez y Andrés Guardado son dos de los jugadores más carismáticos del equipo verdiblanco. Además, el capitán del club de las trece barras celebró su 41 cumpleaños, mientras que el mexicano volvió al estadio donde jugó tres temporadas.
El portuense salió desde el banquillo en el minuto 62 con la edad que cumple, siendo «un detalle muy bonito del club y de los utilleros. La guardaré con mucho cariño porque jamás me hubiera imaginado jugar y competir con 41 años. No digo nada que después me riñen cuando digo que es mi último año», afirmó a los medios oficiales del club.
El veterano jugador gaditano afirmó después del encuentro que «siempre es importante ir cogiendo ritmo y confianza en los partidos de pretemporada» después de enfrentarse a un equipo que empieza la Liga holandesa en menos de una semana y que por eso «se nota que tienen más ritmo» que el conjunto andaluz. El motivo es por falta de rodaje, ya que «se nota en las piernas que ese físico y esa chispa que siempre se alcanza en Liga«.
Y el con 4️⃣1️⃣… @joaquinarte pic.twitter.com/rm7GDqPGwc
— Memoria del Betis (@MemoriadelBetis) July 23, 2022
El mexicano también salió como suplente y fue ovacionado por la afición de Países Bajos después de jugar durante tres años: «Tengo un cariño especial por este equipo, yo venía de una situación difícil en mi carrera y en Holanda me dieron un impulso muy grande para ser lo que soy hoy en día».