La policía francesa está centrando su investigación en el casco del siete veces campeón del mundo de F-1.
Los especialistas creen que Schumacher no debería estar debatiéndose entre la vida y la muerte, porque el citado casco no debería haberse fracturado. Por la velocidad que llevaba, su daño cerebral habría sido sólo moderado en caso de no partirse el casco que llevaba por culpa de la cámara.