El nuevo piloto español en la Fórmula 1, Carlos Sainz Jr., que correrá el próximo año con la Scuderia Toro Rosso, ha declarado sentirse muy «alegre» con el anuncio, después de un año «duro» en el que ha vivido una «montaña rusa» hasta finalmente conseguir el asiento como piloto oficial en el ‘Gran Circo’, al que ha llegado para quedarse.
«Son muchas horas de viaje para llegar a ser campeón del mundo. Obviamente es mi objetivo -ser campeón-, no me basta con ser piloto de Fórmula 1. He venido para intentar quedarme», señaló Sainz en su presentación como piloto oficial de Toro Rosso en Torre Espacio, en Madrid, donde ha explicado que tratará de «aprender» lo máximo posible de la experiencia.
En cuanto a todas las felicitaciones que ha recibido, reconoce que la del asturiano Fernando Alonso fue una de las más especiales, siendo uno de sus padrinos en su camino hacía la Fórmula 1.
«Lo de Fernando conmigo ha sido como un cuento de hadas. No es que fuese mi ídolo, le veía como un Dios, como algo superior. Desde muy pequeñito me empezó a apoyar en los medios y equipos, algo que se lo agradeceré toda mi vida».
«En la pista, me voy a pelear con él como en los karts, con una sonrisa en la cara».
En esta andadura el madrileño llevará el número 55 en su monoplaza.
«Es el que más ilusión me hacía. El 5 es un número que siempre me ha dado suerte, pero lo tiene Sebastian Vettel. El 55 es un número capicúa que pega muy bien con las dos eses de mi nombre».
El piloto madrileño se ha visto respaldado por su triunfo este año en las World Series by Renault con el equipo DAMS, batiendo el récord de victorias -siete- y vueltas rápidas.
«Tenía mucha presión cuando me confirmaron en las World Series. Si quería ser piloto de Toro Rosso no me quedaba otra que ganar de manera convincente. He sabido aguantar la presión en momentos duros. Eso también me da mucha más confianza para la Fórmula 1, donde habrá mucha más presión de la que he tenido este año».
Sainz, que empezó su carrera corriendo en karts acompañado siempre por su tío, cree que en esta nueva etapa también podrá disfrutar de la familia.
«Siete años en karts es lo único que me han dado gratis, el comienzo. Todo el mundo se creía que iba de viaje con mi abuelo, pero era mi tío. Desde los siete hasta los 20 ha estado siempre a mi lado y ahora ya puede disfrutarlo toda la familia entera».
Tras el anuncio del que será su compañero en Toro Rosso, Max Verstappen, las opciones de Carlos Sainz de ocupar un asiento en la categoría se esfumaban, pero finalmente el tan ansiado anuncio se hizo oficial ayer, en un comunicado de la escudería filial de Red Bull.
«Le conocí el otro día en Abu Dhabi. No hubo tensiones, seguro que nos llevaremos muy bien».
«Nos tocará batirnos el uno al otro y esa será la parte más divertida, un duelo bonito, un año en el que habrá que demostrar muchas cosas».
En cuanto a su apellido, reconocido en el mundo del automovilismo por su padre, ha asegurado que no siente ningún peso.
«Hay mucho trabajo y sacrificio detrás de todo esto. Desde muy pequeño me di cuenta del padre que tenía, era diferente. Me tocó forjar mi nombre y decir aquí estoy yo. No me van a poder comparar mucho con él porque corría en rallys».
«El test en Silverstone fue muy importante, me ayudó mucho en 2013, que tuve un año complicado. Fue clave para confiar en mí mismo y mantener la confianza de Red Bull. Gracias a ese test me pusieron en las World Series y les pude demostrar que también era capaz de ganar un campeonato».