Lo de Carlos Sainz es de locos.
El piloto de 25 años ha demostrado de qué madera está hecho durante el GP de Hungría.
El madrileño tuvo una dura batalla con Charles Leclerc, quien será su compañero en Ferrari el próximo año, y después de acercársele en un par de oportunidades, dejó al de Mónaco perplejo cuando le adelantó por dentro en la Curva 1 de uno de los circuitos más lentos de la F1.
Con todo, no fue un magnífico resultado para el piloto español, pues no pudo aprovechar el inicio de la carrera, pero se alzó con el noveno lugar y pudo sacar pecho a pesar de una mala decisión estratégica en la entrada a los pits.
«Fue difícil, dificilísimo. Debe haber un ritmo muy diferente para lograr un adelantamiento y hubo que arriesgar mucho, estuvimos cerca. Funcionó. Claro que me divertí, pero fue por un décimo puesto así que es menos divertido. Difícil adelantar aquí aunque llevase un neumático con menos desgaste que él. Él cometió un pequeño error y me pude tirar a saco en la Curva 1.», explicó Sainz Jr.
¡Bravo @Carlossainz55!
Gran adelantamiento a Leclerc. #HUNmovistarF1 pic.twitter.com/1ajhWJHdRi— F1 en Movistar+ (@movistar_F1) July 19, 2020
El piloto también explicó lo sucedido en la parada de pits, pero no responsabilizó al equipo y elegantemente dijo que fue un asunto de «mala suerte con el tráfico».
«Tengo la sensación de que perdimos muchos puntos. La salida fue buena, me coloqué en una muy buena posición, pero cuando llegó la primera ronda de pit stop tuvimos muy mala suerte con el tráfico, el equipo no me podía sacar y perdimos cinco segundos. Hubiera salido delante de los Haas y Ricciardo, ahí se nos ha ido la carrera», concluyó.
La victoria, como era de esperarse, se la llevó Lewis Hamilton, quien llegó por delante de Max Verstappen y Valtteri Bottas en un gran premio donde quedó demostrado una vez más el poder de Mercedes.