El ciclista Lance Armstrong, siete veces campeón del Tour de Francia, desestimó este jueves las acusaciones de su ex compañero de equipo Floyd Landis respecto a habría utilizado drogas para mejorar su rendimiento.
Landis, quien fue despojado de su victoria en el Tour de 2006 tras dar positivo por testosterona, confesó haber consumido sustancias prohibidas para mejorar su rendimiento y acusó a otros ciclistas, incluyendo a Armstrong, de doparse.
«No tengo nada que ocultar. No tengo nada que ocultar», insistió Armstrong, quien fue líder del equipo de Landis U.S. Postal, antes de retirarse de la quinta etapa del jueves de la Vuelta a California.
«(Las acusaciones) ni siquiera vale la pena comentarlo. Yo no voy a perder mi tiempo. Creo que la historia habla por sí misma. Todos hemos seguido este caso (de Landis) durante los últimos cuatro años», agregó.
Armstrong, quien fue llevado al hospital después de una fuerte caída a comienzos de la etapa del jueves, dijo que Landis no tenía credibilidad. «Este es un hombre que ha estado bajo juramento en varias ocasiones y ha dado una versión muy diferente. Y ahora, cuando todo acaba, la historia cambia. Así que estamos un poco confundidos», agregó.
Armstrong ha tenido que defenderse de acusaciones de dopaje, pero nunca ha dado positivo en un control y siempre ha negado tomar sustancias prohibidas. «Es nuestra palabra contra su palabra. Me gusta nuestra palabra. Me gusta nuestra credibilidad. Floyd perdió su credibilidad hace mucho tiempo», agregó.
Armstrong, sobreviviente de un cáncer testicular, ganó siete veces el Tour de Francia entre 1999 y 2005, un récord en la competición, antes de retirarse. El norteamericano hizo una reaparición el año pasado a los 37 años y terminó tercero en el Tour, pero en este curso buscará su octava victoria en la ronda gala después de formar su propio equipo, RadioShack.
