El corredor español Oscar Freire se ha mostrado «muy animado» respecto a sus posibilidades para sumar su cuarto entorchado en el Campeonato del Mundo en ruta que se disputará en las ciudades australianas de Melbourne y Geelong, donde puede entrar en el Olimpo del ciclismo al ser el primer y único ciclista en alcanzar esta cifra.
«El récord, más que en mi cabeza tiene que estar en mis piernas, aunque, en principio, tengo la oportunidad de entrar en la historia. Soy el único que puede ahora. No sería decepcionante si no lo consigo. Tengo una gran carrera como ciclista y si no consigo el cuarto Mundial no sería ninguna espina. Ganar tres es importante, pero cuatro es la mejor», dijo tras la presentación del equipo en Madrid.
El velocista del Rabobank holandés, quien ya se ha coronado previamente en la ciudad italiana de Verona (1999 y 2004) y en Lisboa (2001), está al nivel de mitos de este deporte con tres títulos mundialistas como Alfredo Binda, Eddy Merckx o Rik van Steenbergen, por lo que espera «responder como otros años» y con «las ganas y la fuerzas» de sus mejores años.
Asimismo, y con respecto al recorrido previsto por la organización australiana, el sprinter cántabro aseguró que «no será fácil» dada la dureza de los repechos. «Algunos dicen que es muy duro y otros que será muy fácil. Habrá que esperar al paso de los kilómetros para valorarlo y a ver cómo sale la carrera. Pero lo que es seguro es que no va a ser fácil», zanjó.
Por su parte, el de Torrelavega resaltó como «positiva» su temporada pese a no brillar en el Tour de Francia o en La Vuelta a España, en la que aúna victorias importantes como su tercera Milán- San Remo, el Trofeo Cala Milor, dos etapas en la Vuelta a Andalucía y otros tantos en la Vuelta al País Vasco.
«Ha sido positivo. Aunque en el Tour no estuve bien por la sinusitis y en La Vuelta llegué algo justo después de la operación, he alcanzado seis victorias y la Milán-San Remo, entre ellas. Sólo espero recuperar el nivel del primer tramo de la campaña», comentó.
Y es que el tricampeón del mundo confirmó que se encuentra «mucho mejor» de lo que demostró en la ronda española, donde apenas brilló en las llegadas masivas. «En La Vuelta sabía que iba a ser difícil por el calor y el recorrido. Pensaba que lo haría mejor, pero no pude. Por eso, cuando me retiré tras Cotobello, descansé tres días que me vinieron muy bien. Entonces noté que estaba mucho mejor», apuntó.
Pese a todo, Freire recalcó que aún le restan varios días para preparar la prueba y para afinar la puesta a punto. «He entrenado muy bien estos días y ahora, una vez que viajemos, habrá que hacer algún entrenamiento especial porque tenemos muchos días por delante», indicó el velocista, que tendrá que adaptarse a un desfase horario de 10 horas.
«GILBERT SERA EL MAS PELIGROSO»
Por otro lado, Freire, quien llega con el cartel de favorito, ha resaltado un amplio abanico de rivales para la cita oceánica, primando por encima de todos al belga Philippe Gilbert (Omega Pharma-Lotto), vencedor de dos etapas de la última edición de la Vuelta a España, así como el italiano Filippo Pozzato (Katusha) o el ruso Aleksandr Kolobnev (Katusha).
«Con toda seguridad será el Gilbert el rival más peligroso. Llega en forma como demostró en La Vuelta y seguro que estará muy motivado. Además estarán Pozzato, Kolobnev –vigente medalla de plata– y, en caso de un hipotético esprint, estará el noruego (Thor) Hushovd», señaló.
Por último, el líder del combinado español, que estará respaldado por otros compañeros de la talla de Samuel Sánchez (Euskaltel) o Fran Ventoso (Carmiooro), entre otros, ha lamentado que el murciano Alejandro Valverde no sea de la partida por sui suspensión por dopaje. «Es una pena. Seguro que iba a estar delante y que sería de gran ayuda, pero el ciclismo es así», concluyó.