La Real Federación Española de Golf perdió durante el año pasado un total de 10.981 licencias, lo que supone un descenso del 3,7 por ciento en el número de jugadores federados, aunque mantiene más de 285.000, según los datos del recuento oficial realizado con fecha de 31 de diciembre.
El pico máximo de número de licencias se produjo en 2010, cuando hubo 338.588 federados, iniciándose desde entonces un proceso de decrecimiento que abarca el último lustro.
Según el último recuento realizado por la Federación Española, el número de licencias femeninas supera las 84.000 en la actualidad, lo que supone un 29,7% del total de licencias de golf, mientras que la cantera del golf español se asienta sobre 21.530 niños menores de 16 años, lo que en términos porcentuales supone el 7,6%.
Durante 2014, todas las Comunidades Autónomas registraron números rojos en el apartado de licencias a excepción de Melilla (+33,6%) y Baleares (+0,1%), explicado en el primero de los casos por la creciente implantación de su campo público.
En términos absolutos, Madrid, Cataluña y Andalucía fueron las Comunidades Autónomas que sufrieron un mayor descenso de federados a lo largo de 2014, en concreto 3.029, 2.191 y 1.414 licencias menos, respectivamente.
En términos absolutos, Madrid, con 84.843 federados, concentra el 29,7% del total de licencias seguida de Andalucía, con 45.083, y Cataluña, con 32.041, concentrando por su parte el 15,8% y el 11,2% del total de federados, respectivamente. Comunidad Valenciana (19.669), País Vasco (18.455), Castilla y León (15.118) y Galicia (10.776) son las otras Autonomías que superan la barrera de los 10.000 federados.
