El seleccionador español de balonmano femenino, Jorge Dueñas, reconoció que el estreno este sábado ante Montenegro fue «el soñado» (19-25) para encarar con garantías el complicado Grupo A del torneo olímpico de Río de Janeiro 2016, al tiempo que explicó su sorpresa después de que la IHF impidiese disputar la segunda mitad a Nerea Pena.
«El inicio ha sido el soñado, claro que existen cosas que mejorar pero el nivel defensivo del equipo ha sido altísimo, y el trabajo táctico ha sido impecable», indicó tras el debut olímpico en el Arena del Futuro de Río. La vigente bronce olímpico despachó a la subcampeona en Londres 2012, una Montenegro que fue de hecho la verdugo de España en las semifinales de hace cuatro años. Desde la defensa, las ‘guerreras’ plantearon un serio encuentro con el que lograron una toma de contacto inmejorable. «Nada tiene que cambiar, el lunes nos cruzaremos con Noruega que llega de perder ante Brasil, quizá afectada por el horario del partido, y nada va a ser sencillo, tenemos que seguir al mismo ritmo», añadió sobre el camino a cuartos de final. Por otro lado, Dueñas reconoció su preocupación después de que Nerea Pena, autora de cuatro tantos en el primer tiempo, no pudiese ser de la partida en el segundo tiempo por la por la desaprobación de la Federación Internacional de Balonmano a la rodillera de la pamplonesa. «Nerea Pena no pudo jugar la segunda mitad porque la IHF la impide jugar con el modelo de rodillera que utiliza, y eso es algo que tenemos que solventar en las próximas horas. De todas formas, resulta chocante que haya jugado con ella los últimos dos años y, ahora, la IHF ponga el acento en ello», finalizó.
