En el mundo del deporte, sobre todo del que necesita de una masa muscular desarrollada, es común el uso de los esteroides. Según un informe publicado en Endocrine Reviews, hasta el 20% de los atletas vinculados al fisicoculturismo los consumieron en algún momento de su carrera.
Las consecuencias se dividen en diferentes tipos: Irreversibles, reversibles, a corto plazo y a largo plazo, entre otras. También se manifiestan de distintas formas para el hombre y la mujer, según recoge Infobae.
En el sistema hormonal masculino, la infertilidad, calvicie, el desarrollo de senos y encogimiento de los testículos, son algunos de los efectos, mientras que en el femenino, el crecimiento excesivo del vello corporal es el que más se destaca.
El acné incontrolable es uno de los resultados más evidentes. Las glándulas sebáceas producen más grasa y colesterol, lo que hace que la piel se vuelva más grasosa y, en consecuencia, aumente la producción de bacterias. Podrían quedar daños de por vida, debido a que el acné causado por los esteroides podría aumentar el riesgo de cicatrices permanentes.
Las hormonas que se encuentran en los esteroides podrían causar una alta presión sanguínea, ya que el cuerpo retiene sodio y líquidos, provocando una mayor presión sobre los vasos sanguíneos. Según el documento presentado por Endocrine Reviews, la presión sanguínea de los consumidores de esteroides fue entre 8 y 10 milímetros de mercurio más, que la de los que no consumían.
VÍDEO DESTACADO: La fatal obsesión por los esteroides arruinó las vidas de estos deportistas
