Y la sorpresa ha saltado en Monte Carlo. Rafa Nadal no ha rendido a su mejor nivel en la gran final, en el partido en el que sabía que no podía cometer errores.
Los que ha tenido, los ha acabado pagando muy caros ante un Djokovic brillante en el primer set y fulminante en los momentos decisivos.
El tierras monegascas hay ahora, ocho años después, un nuevo rey, Novak Djokovic, el número 1 del mundo, el tenista que se dolió de su rodilla en sus primeros partidos del torneo y parecía que iba a retirarse.
Después de verse las caras en la final del año pasado, el serbio aterrizaba a la arcilla de Montecarlo con ganas de revancha y, con un espectacular inicio, Djokovic se adjudicaba el primer set dejando el casillero de Nadal con tan sólo dos juegos.
Ya en la segunda manga, el español igualaría la batalla, aunque finalmente el serbio ganaba el partido en el ‘tie-break’.
De esta forma, el número uno del mundo vuelve a alzarse con un título tras conquistar el Open de Australia en enero.
El resultado, un 6-2/ 7-6 a favor de Nole, no refleja sin embargo todo lo que ha sido el partido, porque Rafa pudo ganar la segunda manga y hubiera impuesto su fuerza en la tercera.
Ahora vendrá Roland Garros y ahí veremos.