El príncipe Felipe asistirá este domingo a la final para apoyar a los tenistas españoles
Roland Garros es territorio español. Por mucho que les duela a los franceses, que ste 7 de junio de 2013 ‘lloraban’ apenados al ver como el alicantino David Ferrer hacia trizas al galo Jo-Wilfried Tsonga y se abría paso para disputar este domingo la final del torneo parisino contra el 7 veces campeón Rafael Nadal, que antes había vencido al serbio Novak Djokovic en un duelo sublime.
Puede ganar cualquiera, pero lo que está seguro es que habrá un vencedor español en el torneo parisino.
Será la primera final española desde 2002, cuando Albert Costa se impuso ante Juan Carlos Ferrero, y la tercera de la historia, tras la de 1998, con victoria de Carlos Moyá sobre Alex Corretja, y la de 1994, donde Sergi Brugera se impuso ante Alberto Berasategui.
Ferrer ha asegurado que se trata del máximo hito de su carrera deportiva:
«Me siento muy bien. Estoy muy contento. Estar en la final de Roland Garros es un sueño. Es lo más importante de mi vida».
«Es en un momento muy bueno. Soy más mayor pero también tengo más experiencia».
«No estoy cansado y eso es muy importante para jugar la final contra Rafael Nadal porque tendré que estar al cien por cien».
Ferrer, que tiene 31 años, ha accedido a la final sin perder un set en todo el torneo, pero lo tiene complicado.
Nunca ha ganado en tierra a Nadal y arrastra en el palmares un parcial de 19 derrotas y sólo 4 victorias en sus enfrentamientos directos.
Con su victoria de este viernes sobre Djokovic, Nadal suma 20 triunfos frente al número uno del mundo, para quien ha tenido palabras de elogio:
«Novak es un gran jugador, un luchador, ha servido para ganar el partido, ha dispuesto de bolas imposibles en momentos difíciles. Estoy seguro de que ganará otro año aquí en Rioland Garros. Yo sigo preparado para la lucha, he luchado mucho y lo seguiré haciedo».
El príncipe Felipe asistirá este domingo a la final para apoyar a los tenistas españoles.