La española Garbiñe Muguruza ha lamentado haber tenido que abandonar la final del torneo de Wuhan (China), puntuable para la WTA, por problemas físicos en el tobillo izquierdo, aunque se ha mostrado satisfecha de su actuación en 2015 y ha expresado su deseo de «mantener» su buen estado de forma «hasta final del año».
«Hoy me desperté muy cansada y con dolor en el tobillo izquierdo, pero me dije ‘venga, vamos a intentarlo’. En la pista me encontré que poco a poco el dolor iba a más y que con tanto partido que llevo el resto de mi cuerpo también empezaba a molestarme, la pierna izquierda y luego la espalda», declaró tras su retirada en la final, en la que la estadounidense Venus Williams se llevó la victoria (6-3, 3-0). «Ayer a la noche llegué al hotel como a las ocho y realmente no hay mucho tratamiento que pueda hacer. No tuve mucho tiempo para recuperarme, así van las cosas. Pero vamos a trabajar ahora en poder recuperarme. Pekín es un torneo muy importante. Vamos a ver cómo me levanto mañana», prosiguió. Entre este sábado y el domingo se le realizarán las pruebas oportunas. Su entrenador, Sam Sumyck, ha solicitado al supervisor de la WTA poder debutar el martes en Pekín, donde está exenta de la primera ronda, para contar con más tiempo de recuperación. Por otra parte, Muguruza se mostró sorprendida por su próximo ascenso, el lunes, al número cinco del ranking WTA, un día en el que también se colocará cuarta en la Carrera a Singapur. «La verdad es que no sabía que estoy quinta, nunca miro esas cosas. No quiero saberlo», indicó. «Está siendo sin duda una gran temporada. Si trabajas mejoras en la pista y eso te hace subir en el ranking y te sientes bien. Quiere decir que estás haciendo las cosas bien. Esperemos que lo pueda mantener hasta final del año», concluyó.
