Rafa Nadal conquistó este 8 de septiembre de 2019 su cuarto título en el US Open, decimonoveno torneo del Grand Slam en su carrera.
El tenista español se impuso al ruso Daniil Medvedev por 7-5, 6-3, 5-7, 4-6 y 6-4 en casi cinco horas.
Con esta victoria, Nadal suma los mismos triunfos en Nueva York que John McEnroe y sólo uno menos que Jimmy Connors, Pete Sampras y Roger Federer.
El suizo cuenta ahora en su palmarés con un Grand Slam más que Nadal, 20, por 16 de Novak Djokovic.
La victoria de Nadal adquirió tintes épicos gracias a su rival, un Medvedev enorme que nunca se rindió, ni siquiera tras verse dos sets abajo, y le ofreció una resistencia inusitada.
Por mucho que Nadal partiera como clarísimo favorito, el ruso dejó claro desde el inicio que no iba a ser un rival cómodo.
El español se asentó con su servicio, sacando adelante sus juegos sin demasiados problemas pese a carecer del cañón del ruso, que abreviaba los puntos cada vez que conectaba un buen saque.
Nadal supo cómo minimizar su potencia, buscándole con el revés liftado, y volvió a romper en un momento clave, en el último juego del set, que se anotó por 7-5. Medvedev no se vino abajo, aunque dejó de sacarle tanto partido a su saque.
Poco a poco, Nadal fue imponiendo su ritmo a un partido que cada vez se jugaba más como él quería. El segundo set (6-3) fue suyo de principio a fin, sacando la derecha a pasear, muy difícil de contrarrestar por Medvedev, que no obstante seguía dejando muestras de su clase y de su carácter competitivo.
En el tercero, Medvedev recuperó la autoridad con el saque y a Nadal le costó responderle.
La final ganó enteros, con tenis de mucho nivel y un despliegue físico extraordinario por parte de ambos. Cada punto era un drama.
El ruso sacó fuerzas de flaqueza y estiró la final cuando el set olía a tie break. Entre el final del tercer set y el comienzo del cuarto Nadal vivió sus peores momentos.
El español superó un momento crítico cuando Medvedev tuvo una bola de break para ponerse con 2-0. Lo salvó el balear con mucho esfuerzo, pero se repitió la película del tercero, con Medvedev cada vez más fuerte, llegando a todas. En el quinto, Nadal volvió a salvar una situación delicada al inicio, cuando Medvedev tuvo dos bolas de break para ponerse 2-0.
El español siguió a su ritmo, se recuperó y rompió al fin el saque del ruso, dos sets después, con un punto espectacular en el que llegó a una dejada imposible y la devolvió cruzada.
A diferencia del tercer set, Nadal sí consolidó el break. Con 5-2 sacó para ganar el partido pero una doble falta primero y una penalización después dieron el juego a Medvedev.
En el siguiente tuvo dos bolas de campeonato al resto, pero el ruso resistió. A Nadal no le entraba el primer servicio y pasaba apuros, pero cerró el torneo con un último esfuerzo. El cierre apropiado para un partido de leyenda.