Red Eléctrica eleva sus inversiones para evitar apagones

Red Eléctrica eleva sus inversiones para evitar apagones


Red Eléctrica de España (REE) ha modificado el Plan Estratégico de la compañía presentado en febrero pasado para el periodo 2007-2011, que preveía unas inversiones de 3.000 millones de euros. Ahora, esa cantidad se eleva a 10.000 millones entre 2007 y 2016, lo que supone pasar de unas inversiones anuales de 600 a 800 millones de euros.

Así lo anunció ayer el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Joan Clos, en su comparecencia ante la Comisión de Industria del Senado. El objetivo de ese aumento de las inversiones es, según Clos, mejorar la red eléctrica nacional y evitar apagones como el ocurrido el pasado verano en Barcelona.

El ministro reconoció que ese dinero «se pagará con cargo a la tarifa», lo que supondrá «más esfuerzo de los consumidores». Estas declaraciones chocan con el anuncio que realizó la semana pasada sobre que el recibo de la luz seguirá congelado en 2008 y parte de 2009.

Los ingresos de REE como transportista del sistema proceden del 4,5% de la tarifa eléctrica y el Estado es el mayor accionista de la compañía, a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), con un 20%.

Clos desveló además que ha instado a Endesa y a REE a suprimir los 51 puntos que existen en la red donde se cruzan tendidos aéreos con subestaciones eléctricas -como donde se produjo el apagón de Barcelona-, de los que 49 son de Endesa. También señaló a Málaga, Gerona y Valencia como zonas cuyas redes son «preocupantes» y contienen puntos «críticos».

Por debajo de la inflación

Las declaraciones de Clos chocan con lo que decía la semana pasada en una entrevista en televisión. El titular de Industria afirmaba que el recibo doméstico de la luz subiría en 2008 en proporción inferior a la inflación. Este compromiso «lo mantendremos durante 2008 y parte de 2009», acertó a decir.

En lo que va de año, los consumidores domésticos han tenido que hacer frente a una subida acumulada del 4,6%. En la recta final del año estaba previsto un nuevo incremento (del 1,8%), que fue frenado por el propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

Las pequeñas y las grandes empresas, por el contrario, vieron subir sus facturas, para idénticos consumos, en un 4,3% y 1,9% interanual, respectivamente.

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