(PD).- Los paros están condicionando de forma importante la actividad en los principales mercados de abastos del país ya que los piquetes están obligando a reducir el tráfico de vehículos.
La menor entrada de camiones está reduciendo las reservas acumuladas durante la semana pasada de carne roja, pollo, pescado y fruta fresca. Si los paros se prolongan, estos centros mayoristas podrían quedarse sin mercancías en dos o tres días.
De hecho el miedo a los piquetes que ocupan la entrada de los principales mercados de abastos del país ha reducido la afluencia de compradores hasta en un 90% en el caso de frutas y hortalizas.
Mientras, las gasolineras afrontan con incertidumbre la merma de sus reservas a pesar de la puesta en marcha de dispositivos de urgencia como en Cataluña. En Madrid, donde ayer el 15% de estaciones de servicio ya no disponía de carburantes, la patronal del sector ha acordado con la Delegación del Gobierno garantizar el «suministro de emergencia» de carburante las próximas 24 horas desde esta pasada medianoche para evitar el «caos», según su presidente, Víctor García Nebreda.
Los paros también están afectando a la industria automovilística, ya que la escasez de suministro de piezas está obligando a algunas cadenas de montaje a suprimir algún turno de trabajo como es el caso de Seat, que tras suspender ayer la producción por la noche, hoy a tenido que hacer lo propio con el turno de tarde en las tres líneas de montaje de la fábrica de Martorell (Barcelona). Además, la fábrica de Nissan en la Zona Franca (Barcelona) ha decidido parar la producción a partir de mañana debido a la falta de algunos componentes, según fuentes de la compañía.
Más atascos en la segunda jornada
Mientras tanto, la segunda jornada de movilizaciones, que según los convocantes registra un seguimiento superior al 90% y la «paralización prácticamente total» en la prestación del servicio en todo el país, está provocando nuevos atascos monumentales en los accesos a las grandes ciudades, así como en la frontera con Francia.
Los puntos más problemáticos de toda la red viaria estatal se registran en los accesos a Madrid. A las 16.00 estaba cortada la A-1 sentido Madrid en el kilómetro 13. También en Cataluña, la marcha lenta de los camioneros ha provocado retenciones en las carreteras C 16c, AP2 y AP7. Asimismo, al igual que ayer, los transportistas y pescadores han vuelto a colapsar los accesos a Cádiz, Puerto de Santa María y la circunvalación de Sevilla.
En el norte, el bloqueo en el paso fronterizo de La Junquera continúa por segundo día consecutivo y se acumulan más de 2.500 camiones con toneladas de mercancías. En el País Vasco, también se mantienen las limitaciones al tráfico en la frontera de Irún. Además, en Lugo, hay problemas de circulación en la A6.
Ante esta situación, el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, ha garantizado hoy el correcto funcionamiento de los servicios públicos esenciales y que productos «absolutamente necesarios», como el carburante, los sanitarios o los alimentarios estén en el mercado a pesar de la huelga de los transportistas.
Normalidad en las grandes superficies
Desde la patronal de grandes superficies, ANGED -que agrupa a cadenas como Carrefour, Alcampo o el Corte Inglés-, han destacado que sus centros funcionan con «total normalidad», sin que existan, por el momento, problemas en el género y sin que se hayan registrado aglomeraciones. En la misma línea, la Asociación de Cadenas de Supermercados (ACES), que engloba a enseñas como Eroski, Supercor, Carrefour Express, Día, Sabeco y Caprabo, ha asegurado que sus asociados «tienen previstos planes de contingencia para asegurar el normal suministro a sus establecimientos».
