(PD).- El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, afirma que la entidad cerrará el presente año con un beneficio neto que superará los 10.000 millones de euros, a pesar de la desaceleración de la economía y la crisis financiera internacional.
«Es evidente que las circunstancias de la economía internacional, con la persistencia de las tensiones de liquidez y una caída brusca en el crecimiento no están favoreciendo en los últimos meses a las entidades financieras en su conjunto», admitió Botín.
Botín señaló que «nadie pensaba» el año pasado que el cambio que se estaba produciendo en la economía internacional se iba a producir «tan pronto y de manera tan intensa».
«Un periodo muy complejo, probablemente el más difícil que haya visto una generación de banqueros ha puesto a prueba las estrategias, la gestión de los negocios y de los riesgos e incluso los propios mecanismos de Gobierno corporativo», aseveró el presidente del Grupo SANTANDER (SAN.MCSANTANDER
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La «tradicional prudencia de Banco Santander en la gestión de los riesgos nos ha permitido, en un ejercicio muy difícil para el sector financiero internacional, evitar las pérdidas en las que han incurrido muchos grandes bancos del mundo».
Pero el presidente de la entidad señaló que la inestabilidad que ha caracterizado a los mercados internacionales «comienza a mostrar síntomas de mejora».
En lo que respecta a los diferenciales de riesgo y tensiones de liquidez «hemos pasado lo peor» y cabe esperar un gradual restablecimiento de la normalidad en los mercados internacionales.
«En cualquier caso, siempre hay que sacar lecciones de situaciones como la actual, que deber servir como revulsivo para que el sistema financiero mundial mejore en diversos aspectos», aseveró el presidente de la entidad.
Además, el carácter recurrente de los resultados del grupo, explicó Botín, asientan «a nuestro Grupo en una sólida base para continuar su crecimiento».
Sobre el crecimiento no orgánico, Botín apuntó que «rechazamos muchas operaciones que pueden ser muy rentables, pero que no encajan en nuestra política de riesgos».
«Nuestro grupo tiene un tamaño adecuado para seguir siendo muy rentable para nuestros accionistas a medio y largo plazo.
Naturalmente, es nuestra obligación estar atentos por si se presentan en el futuro operaciones de crecimiento inorgánico, pero nunca abordaremos adquisiciones por el simple hecho de aumentar nuestro tamaño», sentención el presidente del Santander.
SUPERVISIÓN Durante su intervención ante los accionistas, Botín alabó la gestión supervisora del Banco de España, que se ha caracterizado por su «excelente calidad» y la regulación «prudencial».
«Gracias a la visión de anticipación del Banco de España, el sistema bancario español en su conjunto goza de una posición de capital y de provisiones muy confortable para hacer frente al futuro», señaló.
El máximo directivo de la entidad financiera aseguró que el banco «no ha tenido que llevar a cabo ningún tipo de provisión especial ligada a títulos vinculados al mercado hipotecario subprime o a productos que se han visto afectados por la situación financiera internacional».
A juicio de Botín, la atención y vigilancia sobre la gestión de la liquidez «se ha puesto en primer plano durante el año pasado y está siendo, también en 2008, un rasgo distintivo de la gestión de las entidades financieras».
En este sentido, el presidente del banco recordó que en 2008 «nos adelantamos y abrimos el mercado», al realizar emisiones por importe de 15.000 millones de euros, «a pesar de las dificultades de los mercados».
«Puedo afirmar, en consecuencia, que banco Santander no está limitado ni necesita limitar el crecimiento del crédito debido a cuestiones relativas a la liquidez» que, como siempre, el «único» condicionante será la calidad crediticia.
En cuanto a la cotización de la acción, Botín admitió que, aunque el valor de los títulos ha descendido un 15,4% desde que se iniciaron las turbulencias financieras el pasado verano, «nos situamos en 7º lugar del mundo por valor en bolsa» y «valemos más que el 2º, 3º, 4º y 5º bancos españoles juntos».
En su opinión, la cotización de la acción «sigue sin reconocer el gran potencial» de generación de beneficio recurrentes.
El presidente de la entidad detalló que el Consejo de Administración ha aprobado el reparto de un dividendo con cargo a los resultados de 2008 de 0,135234 euros, que supone un crecimiento del 10% respecto al primer dividendo a cuenta del año anterior. El pago se realizará el próximo 1 de agosto.
