(PD).- La aerolínea europea de tarifas bajas Ryanair cerrará temporalmente su base en Valencia a finales de este año, lo que supondrá mantener en tierra los dos aviones que tiene en el aeropuerto de Manises y cancelar 504 vuelos.
El director de Recursos Humanos y Servicios de Vuelo de Ryanair, Eddie Wilson, ha anunciado hoy que esta decisión se ha adoptado porque la aerolínea «no ha recibido ningún apoyo» de la Administración, porque los gastos en el aeropuerto de Valencia están «entre los más caros» de España y por el elevado precio del petróleo. Según Wilson «con el petróleo a 140 dólares el barril, los vuelos en aeropuertos caros como Valencia deben reducirse este invierno cuando las tarifas son muy bajas».
Según ha explicado, Ryanair es la única línea «capaz de conservar durante todo el año el turismo y los contactos de negocio en ciudades regionales como Valencia», pero para ello se requieren gastos de aeropuerto bajos y el apoyo local para sostener estas operaciones, en particular durante los meses bajos de invierno.
Ryanair ha expuesto estas consideraciones a AENA buscando una reducción de los gastos de estos vuelos para el invierno, pero no se ha llegado a ningún acuerdo para mantener sus servicios en Valencia «en unos términos viables en beneficio del aeropuerto y de la región a la que sirve».
El cierre temporal se llevará a cabo desde el domingo 4 de noviembre al viernes 19 de diciembre, periodo de temporada baja. La aerolínea estima que el tráfico de pasajeros en el aeropuerto de Valencia se reducirá en 80.000 personas como consecuencia de esas cancelaciones, lo que costará a AENA una pérdida de ingresos comerciales por el turismo de unos 8 millones de euros, así como la destrucción de 80 empleos, según indica la aerolínea.
Ryanair abrió su base número 22 en el aeropuerto de Manises en octubre de 2007, con una inversión de 163 millones de euros en dos nuevas aeronaves y once nuevas rutas, que se sumaron a las diez ya existentes.
