(PD).- Dos semanas, cinco días, 23 horas y 58 minutos. Esa es la pena que la Securities and Exchange Commission (SEC, la comisión del mercado de valores de Estados Unidos) ha impuesto a los operadores bajistas por provocar el desplome del sector financiero en bolsa.
Y la condena termina hoy, a las 23:59 hora de Nueva York (las 5:59 de la madrugada de mañana en España).
Escribe Tomás Monge en El Economista que a esa hora se levanta la prohibición del short selling, la venta de acciones a préstamo, sobre 970 valores financieros en Wall Street. La libertad, eso sí, será sólo condicional: el regulador mantendrá algunas restricciones.
La SEC cortó el grifo a este tipo de operativa el pasado 17 de septiembre, con el mercado todavía en estado de shock por la quiebra de Lehman Brothers y con Morgan Stanley y Goldman Sachs en el punto de mira.
Ese día, y con vigencia desde la medianoche del jueves 18 de septiembre, quedó prohibida cualquier venta a préstamo sobre cerca de 800 empresas relacionadas con el sector financiero -algunas de ellas con más de un valor cotizado, por lo que el número de títulos ascendió a 970-.
La medida generó una fuerte polémica, porque culpaba indirectamente, o no tanto, a los bajistas de la fulminante caída de las grandes entidades de la banca de inversión.
En los días siguientes a la prohibición, que fue imitada por el regulador de los mercados británicos, salieron a la superficie posiciones bajistas millonarias en muchas de las principales entidades financieras del mundo.
Pero, polémicas aparte, ha cumplido con su cometido: frenar la caída de los valores financieros, duramente castigados en las semanas anteriores. Desde la entrada en vigor de la orden, Bloomberg puso en marcha un índice que recoge la evolución de los 970 títulos con la operativa bajista restringida.
Entre el 18 de septiembre y el lunes 6 de octubre, ese índice -el Bloomberg US Restricted Short Sell Index- cedió un 8,04%. El S&P 500, que reúne a las 500 principales empresas estadounidenses, bajó mucho más: un 12,41%.
Amnistía parcial
La libertad de los operadores bajistas, de todos modos, será sólo condicional. La SEC, quizá convencida por el éxito de la medida, ha decidido convertir en permanentes parte de las estipulaciones sobre la operativa bajista. En especial, la que se refiere a la prohibición tajante del naked short selling.
En una operación bajista normal, el inversor toma acciones a préstamo, que vende a una tercera parte, con la esperanza de recomprarlas más baratas en el mercado en el futuro. En el naked short selling, sin embargo, el bajista no entrega al comprador ningún título hasta que cierra su propia posición, en muchas ocasiones varios días más tarde. La SEC obliga desde el 18 de septiembre a que el vendedor entregue al comprador los títulos objeto de la operación antes del final del día en el que se realice la misma, lo que en la práctica impide esta práctica. En su comunicado de septiembre, el regulador fue durísimo con estos brokers y los acusó de manipular el mercado y mentir sobre las expectativas de las compañías.
La SEC también quiere convertir en ley la obligación, por ahora temporal, que los grandes gestores de fondos tienen de comunicarle sus posiciones bajistas. En un principio, estos anuncios debían ser públicos. Ahora sólo el regulador recibirá la información.