(PD).-Como en los peores tiempos de Felipe González, el Gobierno ZP, benefactor de banqueros y barones del ladrillo, utilizó recursos del Estado al servicio de un empresario privado: Luis del Rivero. El Instituto de Crédito Oficial (ICO), organismo público dependiente del Ministerio de Economía, no sólo prestó 350 millones de euros en 2006 a Del Rivero para hacerse con el 20% de Repsol sino que además sirvió de broker como uno de los colocadores del préstamo. El crédito ascendía a 5.175 millones de euros.
Es lo que tiene jugar en la Champions League de la economía mundial. El Gobierno socialista, que decretó eufórico la muerte del liberalismo en el G-20, ha logrado la chapuza de que el Estado español financie a un oligarca protegido del Kremlin para que se avenga a controlar nuestro sector energético. Zapatero o como la izquierda tapa como puede una trama hedionda de intereses entre financieros y políticos amigos del PSOE. Capitalismo de amiguetes y de tráfico de altos cargos que no duda en rescatar del fango a los amigos con el dinero de los contribuyentes.
El Gobierno de Zapatero no sólo prestó apoyo político a la constructora Sacyr para que se convirtiera en el primer accionista de Repsol YPF, sino también económico. El Instituto de Crédito Oficial (ICO) financió, en 2006, con 350 millones de euros la compra de acciones de Repsol por parte de Sacyr y, además, aceptó participar con papel protagonista en el multimillonario préstamo sindicado de la operación, según cuenta Carlos Segovia en El Mundo.
El ICO no apoya teóricamente operaciones especulativas, sino que lo que buscaba oficialmente financiando a la constructora era conseguir fortalecer ésta y, de paso, asegurar la españolidad y la independencia de Repsol. Cuando, en octubre de 2006, Sacyr hizo pública la compra de un primer 10% de la petrolera, tanto Repsol como su primer accionista en la época, La Caixa, mostraron su apoyo. «Esta operación supone la incorporación al accionariado de Repsol YPF de un nuevo accionista con vocación de permanencia en la compañía, y constituye la reafirmación del proyecto empresarial e industrial independiente de Repsol YPF, enmarcado en su plan estratégico», afirmó entonces el grupo en un comunicado oficial.
Pero todo ha terminado siendo un fiasco, porque el principal candidato a comprar las acciones de Sacyr es el grupo ruso Lukoil. El resultado contradice lo que debe ser la misión del ICO.
ZARZUELA APOYA LA ENTRADA DE LUKOIL
El Palacio de La Zarzuela reconoció ayer, según informa El Confidencial.com, la participación del Rey Juan Carlos en la aparición de la petrolera rusa Lukoil como potencial comprador del 20% que la constructora Sacyr-Vallehermoso posee en Repsol, aunque matizando que se trata de una situación normal en la tradicional política de apoyo del Monarca a las empresas españolas en el exterior. De acuerdo con distintas fuentes, habría sido el propio Juan Carlos I quien habría logrado cambiar la actitud de Rodríguez Zapatero, inicialmente contrario a la solución rusa, por el apoyo a la misma.
El responsable de relaciones con los medios de comunicación del palacio de la Zarzuela, Juan González Cebrián, aseguró ayer que “de acuerdo con una línea de conducta establecida con este y otros Gobiernos, el Rey ha estado apoyando las relaciones de España con Rusia, como lo ha hecho también con otros países.
