(PD).- El Banco de España no sólo ha cambiado su discurso público sobre las intervenciones en entidades, también las contempla si las cajas no concretan operaciones de fusión en las próximas semanas.
Explican F. Llera y F. Tadeo en El Economista que tras sucesivos intentos fallidos de integración en varias comunidades y el impacto de la crisis económica en el sector, el supervisor bancario está preocupado por la evolución en solitario de algunas cajas, cuya morosidad podría alcanzar este año en casos extremos el 15%. Por ello, está dispuesto a realizar medidas extraordinarias.
«U os fusionáis o intervengo». De esta forma, el Banco de España daba un puñetazo sobre la mesa en una tensa reunión mantenida por separado con algunas cajas de ahorros hace unas semanas a los que les advertía de que el tiempo para la fusiones está agotado en unos casos y a punto de acabarse en otros, y que el paso siguiente, que se dará en unas semanas, es el de la intervención.
Por ello, quizá algunas entidades han recogido el guante y han aprovechado la presentación de los resultados anuales para señalar que están en ello. Así, Caixa Galicia apuntaba ayer que ?lo de las fusiones no nos suena mal?; mientras que en Caja Navarra se apuntaba la necesidad de buscar fórmulas de colaboración. Como tampoco son pocas las cajas de Castilla y León que señalan que «no sé si fusiones, pero algo habrá que hacer».
Cambio de discurso
Y es que parece que el cambio en el discurso público por parte del Banco de España ya se había escuchado y asumido en las sedes de las cajas de ahorros españolas. Por eso no ha sorprendido ver cómo Fernández Ordóñez radicalizaba su posición al no descartar la intervención en alguna entidad española… ¿aviso a navegantes? No,más bien puñetazo en la mesa.
Tras el frustrado intento de unión de las cajas de ahorros vascas por las disputas políticas, el fracaso de la unión de cajas de Castilla y León debido al desinterés de las entidades financieras que se vieron involucradas en una fusión de la que estaban almargen, y las dificultades que se encuentran las entidades de Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura o Cataluña para avanzar en sus procesos de integración, el Banco de España propuso diferentes fórmulas orientadas a su fusión. Sin embargo, la entidad central ha pinchado en hueso con todas sus propuestas hasta el momento.
Ibercaja, que suena como la posible novia de Caja Castilla- la Mancha, negó ayer que exista un proceso de fusión abierto a pesar de que ?pueda ser bien vista para que cualquier otra entidad reciba nuestra ayuda?. ?En estos momentos tampoco entiendo que haya ninguna en esa situación de necesidad como para que Ibercaja tenga que recurrir a absorberla?, aclaró un directivo de la caja. Sin embargo, no sería la primera vez ni probablemente la última en que un directivo niega una operación cinco minutos antes de acometerla. Emilio Botín desmintió la fusión con el Central en la última rueda de prensa previa a la operación entre ambos.
