La necesidad de estar asegurado es menor entre los jóvenes menores de 25 años que entre la población adulta, pero resulta significativo que la inmensa mayoría (84,7%) del colectivo entre 18 y 24 años de edad afirme que no cuenta con ningún tipo de seguro. Así se desprende del segundo informe realizado por ICEA sobre la percepción del seguro y que, tras el elaborado en 2011, incorpora por primera vez la visión que los jóvenes españoles tienen del sector asegurador. Sus principales preocupaciones no difieren mucho de las que tienen los adultos, aunque el problema del empleo se acentúa mucho más.
Los seguros no parecen un producto muy necesario para los más jóvenes, con menos responsabilidades a su cargo más allá de la póliza obligatoria que deben tener aquellos con vehículos propios. Más por estas cuestiones, u otras de índole económica, y no por pasotismo, el colectivo de 18 a 14 años asegura en un 84,7% que no cuenta con póliza alguna contratada, según el informe sobre la percepción del sector elaborado por ICEA y publicado junto a la Fundación Mapfre.
Se trata del segundo informe de este tipo y por primera vez incluye una encuesta a 300 jóvenes pertenecientes a ese círculo. También resulta muy significativo, que entre el colectivo entre 25 y 65 años se afirma ahora que un 4,9% no tiene seguros contratados, cuando en el anterior informe de 2011 ese porcentaje tan sólo suponía un 1,3%, como destacaron la directora del área de consultoría de ICEA, Elvira de la Cruz, y el subdirector del área de seguro y previsión social de la Fundación Mapfre, César Quevedo, durante su presentación.
Las principales preocupaciones entre los más jóvenes y la población adulta no difieren mucho, aunque el problema del empleo (ya no tanto por perderlo, sino por encontrarlo) se acentúa entre el colectivo de 18 a 24 años al representar un 68%, seguido por los problemas de salud (un 30%, frente al 50% que representa entre la población adulta) y la situación económica personal (25%).
Las diferencias tampoco son sustanciales en el caso de la información que cada colectivo busca a la hora de contratar un seguro. Para un 86,4% de los jóvenes las coberturas son la variable más consultada, mientras que el precio representa un 74,3%. Entre la población adulta, las coberturas han ganado en importancia (98,9%) y los precios (54,9%) suponen la segunda variable más buscada.
La brecha digital sí que aporta un comportamiento dispar en cómo se informa cada uno de los colectivos. Entre los jóvenes, Internet o distintos foros sociales representan un 83,7% de los medios para la obtención de información, mientras que entre los adultos tan sólo representa un 52,4% y los consejos en oficinas, por corredores o bancos aún suponen un 46%. Un canal que tan sólo influye en un 24,7% para los menores de 25 años.
FORMACIÓN EN LAS ESCUELAS
Tanto los responsables de la elaboración de este informe como los propios encuestados, con independencia de la edad, consideran que es necesaria una formación desde la escuela sobre lo que supone el sector asegurador. Los más jóvenes reconocen en un 51,3% que su conocimiento de la actividad aseguradora es bajo y tan sólo un 12,7% asegura que es alto. La inmensa mayoría (82,3%) reconoce no haber recibido formación en materia aseguradora, por lo que entre el colectivo adulto se dispara la opinión de que es necesaria incorporar como materia en los colegios en qué consisten los seguros. Algunas iniciativas en este sentido ya están en marcha aunque la percepción del sector asegurador es mejor entre los más jóvenes, incluso en el grado de la innovación, las compañías deberían replantearse que en un futuro a corto-medio plazo pueden tener problemas para encontrar personal para su actividad. Un 22,3% de los jóvenes reconoce que le gustaría trabajar en una aseguradora, frente al 64% que afirma de categórica un bajo interés por desarrollar su carrera profesional en el sector.
