El Índice de Prosperidad Económica y de Productividad Energética de 2015 revela que el 98% de la energía se desperdicia y que una pequeña apuesta por la productividad energética impulsará la economía, creará empleos y contribuirá a salvar el medio ambiente.
Se trata de un informe, publicado en la Cumbre de la Unión de la Energía de 2015 en Bruselas, una semana antes del lanzamiento de la Unión de Energía de la UE, que refleja cómo la factura energética de los hogares se podrían reducir en un tercio al implementar más tecnología de eficiencia energética. Hay que recordar que los hogares son los responsables de más del 16,8 % del consumo energético de España.
Además, Europa podría duplicar su rendimiento productivo en el sector para el año 2030. Es más, doblar la tasa de mejora de la productividad de la energía, del 1,5% al 3% por año, haría reducir la factura global de combustibles fósiles en más de 2 billones de euros en 2030 y podría crear más de 6 millones de puestos de trabajo en todo el mundo y en menos de cinco años.
Este documento, el primer informe global que clasifica a los países por su productividad energética en función de su rendimiento económico por unidad de energía consumida, advierte de que la actual tasa de mejora de la productividad de la energía ronda el 1,3 % global y, por lo tanto, es demasiado lenta para mantener el ritmo de la demanda.
«Un ejemplo simple de la importancia de la productividad energética consiste en el proceso de hervir un huevo…, sólo el 2 % de la energía consumida se destina a generar el huevo duro mientras el 98 % de toda la energía que usamos en su producción está siendo desperdiciada», dice el informe.
El actual Comisario Europeo de Acción por el Clima y Energía, Miguel Arias Cañete, ha señalado al respecto que «la productividad energética nos proporciona un marco excelente para aprovechar los recursos infrautilizados» y que «ayudará en los próximos años en el uso de la innovación para impulsar la eficiencia y mejorar el rendimiento de Europa en esta área clave».
Por ello, el informe insta a los políticos a fijar objetivos más ambiciosos para mejorar la productividad de la energía ya que los altos niveles de eficiencia energética «contribuirán al crecimiento económico mundial».
También cita al Secretario General de la ONU y Director Ejecutivo de Sustainable Energy for All, Kandeh Yumkella, quien afirma que «los líderes mundiales están convencidos de que la energía es el hilo de oro que conecta el crecimiento económico y el aumento de la equidad social con un medioambiente sano, pero todavía tenemos que cumplir metas más ambiciosas para mejorar la productividad de la energía.
Y que, tal y como aseguran los expertos, la mayoría de las ganancias de productividad energética tendrán que venir de mejoras en los edificios residenciales y no residenciales mediante el aumento de la utilización de la tecnología disponible hoy en día, tales como dispositivos de ahorro energético, iluminación LED y aislamiento.
En este sentido, la Escuela de Organización Industrial, realiza una serie de recomendaciones en su página web sobre las buenas prácticas en eficiencia energética dentro del hogar, y las formas de proceder que permiten hacer un uso racional de la energía en los diferentes sistemas. Habla de las buenas prácticas en calefacción, en iluminación, en refrigeración, en el uso de electrodomésticos, etc.
Entre otras cosas destaca como un hogar bien aislado reduce los costes de calefacción entre un 20% y un 40%, a la vez que disminuye la necesidad de refrigeración en verano, o como sustituir el 25% de las lámparas incandescentes de la vivienda que permanecen encendidas durante más horas al día, por lámparas fluorescentes compactas, se puede reducir hasta un 50% en el consumo eléctrico en iluminación de la vivienda y recuerda que dos ciclos de lavado a media carga consumen más que uno a carga completa.
Se trata de una serie de consejos de gran utilidad que se pueden encontrar en este enlace: http://www.eoi.es/wiki/index.php/Buenas_pr%C3%A1cticas_en_el_hogar_en_Eficiencia_energ%C3%A9tica
