El 64,3% de los jóvenes viven todavía en su residencia familiar

Colleja sin precedentes a los jóvenes en Italia: obligados a trabajar después de estudiar

Los jóvenes italianos están entre los últimos de Europa en emanciparse para irse a vivir en solitario, el Tribunal Supremo dicta una sentencia histórica: los padres no estarán obligados a mantenerlos indefinidamente al acabar los estudios

Colleja sin precedentes a los jóvenes en Italia: obligados a trabajar después de estudiar

Italia, es una de los países europeos en el que los jóvenes tardan más en abandonar el hogar de sus padres.

En el caso de España, es el sexto país de la Unión Europea con más jóvenes que no han abandonado su hogar familiar en un contexto de precariedad laboral marcada por la temporalidad y los bajos salarios.

Según algunas estimaciones, los españoles se están emancipando a los 29 años y medio, tres años después que el conjunto de europeos, que lo hacen a los 26,2 años.

Por otro lado, el Instituto Italiano de Estadística (Istat), señala que el 64,3% de los ciudadanos de entre 18 y 34 años viven todavía en la residencia familiar.

A este respecto, el Tribunal Supremo de Italia considera que los progenitores solo deben correr con los gastos de sus hijos hasta la finalización de sus estudios y estima que los jóvenes deben encontrar un trabajo para ser autónomos.

El alto tribunal italiano, ha hecho una sentencia histórica: una vez que los hijos han acabado sus estudios, deben encontrar un trabajo porque sus padres no tienen la obligación de mantenerlos indefinidamente.

De esta manera, una vez que terminen sus estudios, los hijos deben independizarse de sus padres y buscar un trabajo que sean capaces de mantener. La autoridades señalan que los jóvenes no pueden esperar que «solo el padre se adapte a cualquier trabajo».

Según una reseña del Corriere della sera, la sentencia del Tribunal Supremo hace referencia al recurso que presentó una mujer contra su exmarido. Solicitaba que siguiera pasando una pensión a su hijo, a pesar de que este ya tenía 30 años y trabajaba como profesor de música con un sueldo de unos 20.000 euros al año.

En la sentencia, el tribunal destaca que el joven debe «reducir sus propias ambiciones de adolescente», alentándolo a seguir trabajando pero de manera independiente y haciéndose cargo de su propia vida.

Por qué esta medida

Italia es uno de los pocos países en el que se mantienen los hijos en casa hasta los 30 años.

El Tribunal Supremo de Italia ha explicado que para evitar que se acabe en un «abuso de derechos», una vez terminados sus estudios, los hijos tienen el deber de buscar trabajo e independizarse, sin cultivar caprichos incompatibles con el cambiante mercado laboral.

Señalan, que la manutención tiene una función educativa y no debe ser un seguro indefinido.

Los jueces aseveran que es obligación de los hijos activarse para buscar algún tipo de trabajo para independizarse.

Con esta sentencia, el Tribunal Supremo recuerda a las familias italianas la necesidad de una ‘revolución cultural’ que debe empezar dentro de los hogares.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

Yéssica Salazar

Licenciada en Comunicación Social, mención Periodismo. Con Máster en Gerencia y Tecnologías de la Información. Con infinito amor por el periodismo y los medios audiovisuales que me han permitido conocer nuevos senderos, diferentes y desconocidos.

Lo más leído