Las colas para acceder al puerto y al túnel de la Mancha en el paso fronterizo entre Francia y Reino Unido, la localidad de Calais, están dejando entre cinco y seis horas de atascos en las últimas semanas ante la anticipación de los británicos por temor a que no haya un acuerdo para el Brexit.
Según la prefectura del departamento del Norte, en los últimos quince días el tráfico de camiones ha pasado de 6.000 diarios a 9.000, lo que está dejando colas inéditas con esperas de entre cinco y seis horas, para desesperación de los transportistas.
Con el Brexit a la vuelta de la esquina, el próximo 1 de enero, y el temor a la escasez de productos, la situación en la frontera es «catastrófica», según el delegado regional en Paso de Calais de la Federación Nacional de Transportistas por Carretera, Sébastien Ribera.
«A la anticipación del Brexit se le añade que con la COVID-19 no hay turismo, así que las compañías marítimas han reducido las rotaciones y hay menos ferris actualmente. Es el cóctel que nos ha llevado a esta situación, con atascos kilométricos y entre cinco y seis horas de espera para cruzar», dice Ribera, que punta en declaraciones a Efe que el caos se prolongará aún varias semanas.
Falta de estructuras para acoger a tantos camiones
La falta de estructuras para acoger a tantos camiones hace que los vehículos y transportistas se acumulen en las vías portuarias y en la autopista A16, esperas que favorecen que los migrantes que pretenden llegar al Reino Unido se infiltren en los camiones.
Ribera estima que hasta el primer trimestre de 2021 no será posible tener una panorámica más amplia de la situación en esta frontera, en la que habrá tiempo de espera añadido por las declaraciones aduaneras, las de seguridad y el tiempo de los controles.
«Hay que readaptar los medios al volumen actual y permitir que haya espacios adecuados y protegidos para el tiempo de espera», reclama Ribera, y en lo inmediato «solicitar a las compañías para que pongan más ferris que absorban el flujo».
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, dijo en la cumbre de jefes de Estado que hay pocas probabilidades de llegar a un acuerdo para una salida amistosa, mientras el primer ministro británico, Boris Johnson, consideró muy probable el fracaso de las negociaciones.
El anuncio de los dirigentes este domingo de prolongar nuevamente las discusiones tampoco ayuda. «La incertidumbre nunca es buena para los negocios», lamenta Ribera.
